HÉCTOR TAPIA
El reto aún es mayúsculo. La geografía política en Michoacán en los últimos 20 años se resistía a cambiar. Al ser una de las entidades con mayor inestabilidad política, social y económica, contrastante con su riqueza natural y potencial de crecimiento, la vida pública de esta entidad de pronto se ha convertido en un termómetro político del país, lo mismo que las entidades proclives a la inestabilidad a partir de su alto nivel de pobreza, marginación, violencia, corrupción e impunidad.
En este contexto, la participación ciudadana en la construcción de una agenda pública que beneficie los intereses de la sociedad más allá de los partidos políticos ha comenzado a fortalecerse en Michoacán; así mismo, la búsqueda de alternativas de representación política también ha sufrido cambios. Aunque aún el voto corporativo y el clientelar siguen influyendo en Michoacán, estas prácticas van perdiendo terreno; los ciudadanos sin partido político y los que han renunciado a los tradicionales ganan terreno a través de la credibilidad en la construcción de alternativas de gobierno y representación popular en los espacios de poder.
Efectos como los suscitados en Jalisco empiezan a contagiar a diversas entidades, como Michoacán, donde la participación ciudadana busca cada vez más incidir en la conformación de la agenda pública, para que se tomen en cuenta los reclamos y propuestas que la misma ciudadanía.
Michoacán, el reto apenas comienza
En el caso de Michoacán, en menos de cuatro años, sin alianzas con otros partidos políticos pero sí aliado a las causas ciudadanas, Movimiento Ciudadano pasó de ganar una alcaldía en el 2011 a gobernar cuatro como resultado del proceso electoral pasado; y por la cantidad de votos se logró colocar un diputado por la vía plurinominal.
Mientras en el 2011, en lo que respecta a la elección de diputados, se obtuvo una votación de 44 mil 284 sufragios, en el 2015 se obtuvieron 67 mil 771 votos, es decir 3.8 por ciento más. En el 2011 no hubo representación en el Congreso local, contrario a esta legislatura, donde, sin alianzas partidistas, se logró colocar a un legislador.
En cuanto a los ayuntamientos, mientras en el 2011 se ganó una sola alcaldía y se gobernó a 14 mil 556 personas, en el 2015 se ganaron cuatro, y se gobiernan 170 mil 526 personas. Los municipios donde se ganaron elecciones, con candidatos que son ciudadanos sin previo historial partidista fueron: Jacona, Zacapu, Benito Juárez y Pajacuarán.
Gobernar con el ejemplo
El despilfarro de los recursos públicos, los salarios exagerados de los gobernantes, la impunidad, la corrupción, la opacidad y el cinismo con que se han manejado, son los principales retos que enfrentarán los gobiernos ciudadanos en los cuatro municipios que ya comenzaron a gobernar desde el primero de septiembre pasado.
En contraparte, los ciudadanos que dieron su voto de confianza a los candidatos de Movimiento Ciudadano exigen también que se hagan gobiernos ejemplares, que les haga recuperar la confianza en las instituciones y que sean partícipes en la toma de decisiones así como en las soluciones de los problemas que demandan esos municipios.
El primer compromiso que cumplen es la reducción salarial de hasta un 30 por ciento de los altos funcionarios, comenzando por los mismos presidentes municipales y los órganos de gobierno de los ayuntamientos que representan. No es el único compromiso.
Además se están impulsando presupuestos participativos donde se tomarán en cuenta las preocupaciones de la ciudadanía, porque en primera instancia son quienes observan las verdaderas necesidades de sus localidades.
La transparencia en el manejo de los recursos públicos es otro de los rubros que se impulsará en los municipios que gobiernan.
Los ciudadanos mandan
A través de los gobiernos que impulsa en el estado, Movimiento Ciudadano se propuso la ratificación de mandato para recobrar la confianza ciudadana en las instituciones.
Esta medida es para recordarle a la ciudadanía que ellos son los que mandan, los que deciden sobre sus gobiernos, y si alguien quiere continuar gobernando tiene que dar resultados.
En Movimiento Ciudadano ponemos a los ciudadanos en el centro de la toma de decisiones, sabemos que la mejor forma de gobernar es con el ejemplo y la mejor forma de hacer política es con buenos gobiernos ciudadanos. El reto apenas comienza.
