Arrancan las campañas de los precandidatos de Movimiento Ciudadano y de la coalición Por México al Frente a cargos de elección popular que habrán de dirimirse el próximo domingo 1° de julio.
En las semanas que faltan para el día de los comicios, se pondrán a prueba aspirantes, organizaciones políticas y plataforma electoral. Factores todos ellos enlazados con la capacidad de transmitir, comunicar a un electorado muy diverso, los contenidos de las propuestas que enarbolamos con un propósito firme: transformar el rumbo de la nación con un cambio de régimen, de un modelo anquilosado e inútil que, conforme avanzan los años, exhibe una ineficacia creciente para resolver los graves problemas que aquejan a millones de mexicanos.
Otros vientos en contra tendrán que enfrentar nuestros candidatos: la resistencia del poder que se rehúsa a abandonar el Palacio Nacional, curules y escaños en el Congreso de la Unión.
Pero otro enemigo a vencer, no menos peligroso, es el escepticismo que, aunque sin argumentos sólidos, siembra cizaña y desconfianza para destruir todo empeño constructivo. Movimiento Ciudadano y las organizaciones políticas que conformaron la coalición Por México al Frente, disponen de una plataforma electoral nutrida de los anhelos ciudadanos, vertidos en foros de consulta por dirigentes sociales, académicos y expertos.
La clave, la responsabilidad de quienes se inscriban para competir por un cargo de elección popular, debe ser la de comunicar con talento y sencillez nuestras propuestas. El triunfo debe ser, será, la culminación de un gran esfuerzo colectivo.
Por el bien de México.