A través de colores radiantes, imágenes de actores políticos y crítica social, las obras de la exposición “Invitación a la fiesta: que 20 años no es nada” abordan sucesos que transformaron la vida y el pensamiento de los jóvenes mexicanos del siglo XX
En el Palacio Legislativo de San Lázaro se inauguró la exposición “Invitación a la fiesta: que 20 años no es nada”, conformada por 20 obras pictóricas que realizó el artista Juan José Zamarrón hace más de dos décadas, mismas que permiten reflexionar sobre la situación política, social y cultural del país en esa época.
Los sucesos representados en estas obras marcaron el inicio de los festejos que anunciaban un cambio inminente al finalizar el siglo XX. Sin embargo, el artista oaxaqueño lamentó que con el paso de los años la fiesta nunca llegó, por el contrario, el neoliberalismo sólo nos dejó “la cruda” como herencia, con la expectativa de un mundo mejor que en realidad permanece igual. Zamarrón resaltó que “al calor de los acontecimientos actuales, tanto los personajes como los sucesos relatados, parece que resucitaron”.
A través de colores radiantes, imágenes de actores políticos y crítica social, las obras de la colección conformada por 50 cuadros, forman parte del proyecto “Mis años en México” que creó el artista de 1994 al 2000, donde decidió abordar sucesos que transformaron la vida y el pensamiento de los jóvenes mexicanos.
El pintor explicó que también aspiran a transformar nuestro entorno, porque “mostrarlas ahora es provocar la memoria de quienes han vivido más; mientras que en los jóvenes busco dirigir su atención hacia el mundo que nos rodea, que muchas veces dejamos de ver en nuestro andar cotidiano. Es importante detenernos un momento para descubrir que formamos parte de estos acontecimientos”.
En este sentido, destacó que en la actualidad la pintura vestida de fiesta nos invita a descifrar los mensajes, reinterpretar los sucesos y proponer nuevas lecturas para salir del enredo en el que estamos metidos. “Como sociedad buscamos respuestas para transformar este mundo en un espacio habitable para todos”, aseguró el artista.
En su intervención, Laura Hernández García, secretaria de Derechos Humanos de Movimiento Ciudadano, destacó que la obra del maestro Zamarrón permite recuperar la memoria histórica para reinterpretar sucesos sociales que nos marcaron en los años setenta, ochenta, noventa e incluso en los primeros de este siglo; los cuales no son ajenos después de 20 años, por el contrario, continúan vigentes, lo que resulta trágico para nuestra sociedad.
“Basta recordar que México vive una grave crisis de derechos humanos, porque todos los días nos enteramos de feminicidios, desaparecidos, crímenes por homofobia, transfobia, masacres, corrupción o narcotráfico. Hechos tan lamentables como Tlatlaya, Ayotzinapa y San Fernando, son algunos de los miles de casos que suceden en nuestro país; sin embargo, continúa la resistencia y demandamos un cambio inmediato”, resaltó.
Además, Laura Hernández señaló que las imágenes y los colores de los cuadros nos animan a reinterpretar los sucesos y a descifrar los mensajes de forma única en cada espectador, “nos sensibilizan y concientizan sobre la importancia de nuestros derechos humanos, porque cada uno debe promoverlos, defenderlos y ejercerlos con pasión, porque sólo así podemos cambiar nuestra realidad”.
Para concluir, la diputada ciudadana Candelaria Ochoa Ávalos expresó que el maestro no solamente pone en evidencia la importancia de los colores y de vivir la pintura, sino la idea de resaltar los derechos humanos y la participación ciudadana. “Lo van a ver a veces diluido, pero otras veces muy presente, como decimos en psicología, el fondo y la forma se ven en cada obra; además nos permite hacer un recorrido por esta tierra oaxaqueña que nos ha dado mucha luz y color”.
En el evento se contó con la presencia de Arturo Sánchez Meyer, presidente de la Fundación Cultura en Movimiento; Macedonio Taméz Guajardo, coordinador del Grupo Parlamentario de Movimiento Ciudadano; el diputado ciudadano Salvador García González y la diputada ciudadana Dalia Rocha Ladrón de Guevara.
