El representante en México de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH México), Jan Jařab, afirmó que casi dos terceras partes de las mujeres periodistas en el mundo han sufrido acoso y deben lidiar con la violencia de género o hacia sus familias.
En el foro Mujeres periodistas: el poder de sus voces, convocado por Comunicación e Información de la Mujer (CIMAC) y realizado en el Centro Cultural España el 9 de mayo pasado, Jařab destacó que frente a esta situación en 2012 fue necesario solicitar mecanismos de protección para 88 periodistas. Sin embargo, el funcionario consideró que hasta el momento la única medida que al parecer resulta eficiente es sacar a la persona del lugar donde labora o vive, lo que desde luego afecta a la mujer periodista y a quienes están en su entorno.
Asimismo, Jan Jařab señaló que es de suma importancia mantener informada a la ciudadanía con perspectiva de género, para que puedan auxiliar a quienes sufren agresiones que van desde la violencia digital, amenazas sexistas, hostigamiento y despidos injustificados, hasta entorpecer el trabajo de investigación, entre otras.
Por su parte, la directora de CIMAC, Lucía Lagunes, compartió que la ausencia de reconocimiento a la labor periodística de las mujeres ha agravado su situación en cuanto a su seguridad, ya que la impunidad es siempre compañera de las investigaciones que se inician. Por esta razón, urgió a incorporar la perspectiva de género, pues implica reconocer su trabajo y permite convertirse en una sociedad incluyente.
La representante del Senado, Angélica de la Peña, dijo que el periodismo en México coloca a las profesionistas en la materia en altos grados de vulnerabilidad, ya que no se destina presupuesto a los mecanismos de protección para dichas trabajadoras, por tanto cuestionó la existencia de dichos mecanismos.
De la Peña señaló que las fiscalías no funcionan como se les mandató en la ley aprobada y recalcó que si a nivel nacional es difícil este tema, a nivel local resulta “patético”, por lo que consideró fundamental que se aplique la ley, así como todos los tratados internacionales que en este sentido firmó México.
En la primera mesa del foro se abordó el tema de la libertad de expresión y los riesgos que enfrentan las mujeres periodistas, mientras que en la segunda se analizó la importancia de la labor periodística de las mujeres para la sociedad. En las intervenciones destacó la periodista Lydia Cacho, quien aseguró que México no tiene políticas públicas que protejan a los periodistas, menos a las mujeres que desempeñan esta profesión. Además, manifestó que quienes ejercen periodismo con perspectiva de género o con perspectiva de derechos humanos o de paz siempre incomodan, debido a que este trabajo rompe con el paradigma tradicional.
Sin embargo, lamentó que esta situación desencadenó una persecución hacia las periodistas que han roto la estructura patriarcal del sistema, pues “en nuestro país no se paga por decir la verdad, sino por decir la mentira, y siempre debe ser una mentira patriarcal”.
A su vez, la comunicadora Denise Dresser comentó que cada 26 horas agreden a una mujer periodista. Esta violencia que tiene ingredientes sexuales se ha incrementado 20% en nuestro país. En este sentido, señaló que la situación que padecen las mujeres periodistas se dimensiona en el ámbito de vida en general de las mujeres de México, ya que “en este país es válido ser sexista y misógino, y no se cuenta con presupuestos adecuados para atender este problema”.
Dresser sostuvo que “si bien se habla de fiscalías creadas para atender los temas de periodistas, en realidad sólo existen discursos y declaraciones vagas, subterfugio tras subterfugio, y pareciera que se da la normalización de la violencia mientras el gobierno no oye lo que pasa”.
Por último, Guadalupe Martínez de la agencia Notimia, que aborda noticias de mujeres indígenas y afrodescendientes, destacó que en su medio de comunicación procuran trabajar periodismo como voces, medios y redes para la paz, ya que consideran que la violencia que se vive es también violencia ecológica y espiritual.
En el foro participaron destacadas periodistas como: Nuria Varela, Guadalupe Martínez, Daniela Rea Gómez y Anastasia Moloney, entre otras. Cabe señalar que este foro se llevó a cabo gracias a la ONU-DH México, la Comisión Nacional de Derechos Humanos y las embajadas británica y sueca.