Desde este espacio pretendemos entablar con los lectores del periódico El Ciudadano un diálogo responsable y permanente sobre temas que consideramos de la mayor prioridad en el grupo parlamentario de Movimiento Ciudadano en el H. Congreso de la Unión.
En ese sentido, durante el inicio de los trabajos del primer periodo ordinario de sesiones correspondiente al segundo año de ejercicio de la LXII Legislatura, refrendamos el compromiso a favor de un mejor medio ambiente en la argumentación del dictamen, con proyecto de decreto, que reformó el párrafo tercero del artículo 156 de la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente, discutido en sesión del Congreso el pasado martes 3 de septiembre.
Al fijar la postura del grupo parlamentario, reiteramos la preocupación por la regulación de leyes que permitan mejorar el actual estado que guarda el país en temas como la contaminación por ruido, vibraciones, energía térmica, lumínica, radiaciones electromagnéticas y olores.
Coincidimos con los demás grupos parlamentarios en el sentido de facultar a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales para que, en coadyuvancia con los gobiernos estatales y autoridades locales, introduzca políticas y programas de prevención para el control de la contaminación a fin de proteger la salud de los habitantes y los ecosistemas.
México es el segundo país con mayor número de muertes por contaminación atmosférica de toda América Latina, según lo reporta un estudio realizado por el Clean Earth Institute. El documento destaca que, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), el país registra 15 mil decesos por año atribuibles a la contaminación del aire, siendo únicamente superado por Brasil, que acumula 23 mil muertes.
Cabe mencionar que las entidades con la mayor generación de contaminantes atmosféricos son el Estado de México, Veracruz, Jalisco y el Distrito Federal, con un promedio de entre 6.4 y 9.4% de las emisiones por actividades humanas. En contraste, Baja California Sur, Quintana Roo, Nayarit, Tlaxcala y Aguascalientes, emitieron menos del 1% del total nacional.
Otro tipo de contaminación que sin duda afecta a la población es la auditiva, definida como el exceso de sonido que altera las condiciones ambientales normales en una determinada zona, interfiriendo las actividades diarias y degradando la calidad de vida de los habitantes.
El ruido excesivo puede provocar insomnio, ataques al corazón, problemas de aprendizaje, estrés, presión alta, pérdida del oído y pérdida de productividad, alterando las distintas actividades e interfiriendo con la comunicación hablada y la concentración, creando estados de tensión y cansancio que pueden degenerar en enfermedades de tipo nervioso y cardiovascular. Al respecto, la misma OMS, considera en 70 decibeles el límite superior deseable de ruido en las ciudades.
Por otro lado, no puede pasar desapercibido el concepto de contaminación electromagnética, generada por la presunta exposición excesiva a las radiaciones generadas por equipos electrónicos, toda vez que se presenta en cualquier sitio sin que tengamos percepción de ella.
Vale la pena mencionar que, a pesar de los esfuerzos realizados en nuestro país, los éxitos alcanzados en este rubro son relativamente nulos, debido a que las estrategias han sido insuficientes, ya que el constante cambio de las tecnologías, el crecimiento acelerado de la población y la generación de industrias, trae consecuencias económicas y sociales que hacen que el comportamiento de cualquier política se vuelva deficiente en esta lucha.
La iniciativa que fue aprobada por unanimidad, con 454 votos a favor, establece que la Semarnat, en coordinación con organismos públicos y privados, nacionales e internacionales, integrará la información relacionada con estos tipos de contaminación, así como de métodos y tecnología de control y tratamiento.
Estamos convencidos de que la problemática de la contaminación es de gran relevancia en México y debe ser un asunto prioritario para las autoridades. Movimiento Ciudadano hace suyos los trabajos en beneficio de los entornos naturales y la salud de los mexicanos.